Erika Villaécija: un estandarte dentro y fuera el agua

A sus 33 años, la nadadora de Sant Cugat, un símbolo de la natación catalana y española

 

Erika Villaécija García es un icono de la natación catalana y española. Es un referente, un modelo a seguir. No tan sólo por sus éxitos deportivos, también por el que transmite fuera del agua. Con 33 años, la de Sant Cugat afrontaba este año la última etapa de su carrera deportiva con la misma profesionalidad e ilusión que el primer día, a pesar de que cómo ella misma dice "todo el que tenía que hacer, ya lo he hecho".

 

Esta está siendo la cuarta temporada de Erika Villaécija al CN Sabadell, en la que este año se estrena como entrenadora de natación de benjamines. También es psicóloga de la Escuela Santa Clara del Club Natación Sabadell. Recientemente, se ha sacado el título de CrossFit , y también es entrenadora. Desde enero del 2017, la santcugatenca es codirectora de Bevalue Sports, con la también santcugatenca Maria Gilabert.

 

Villaécija tiene un currículum espectacular, siendo internacional con la selección española absoluta desde el 2001. Entre un montón de éxitos deportivos, destaca su participación en 4 Juegos Olímpicos, ha ganado una medalla de oro en el Mundial de Pisicina Corta del 2010, en los 800 metros libres, y dos oros en el europeo del 2004 (800 metros libres y el relevo 4X200 metros libres). En el relevo lo consiguió con otra santcugatenca, Melissa Caballero. Villaécija entró al Centro de Alto Rendimiento (CARO) de Sant Cugat en 1999. "Entré al CARO con 15 años. Y todo el que he hecho lo he hecho por y para la natación. Es un estilo de vida y no me arrepiento. Lo volvería a hacer. Me ha dado muchas más cosas del que realmente pierdes".

 

La santcugatenca se inició en el mundo de la natación a los 6 años "porque el pediatra le recomendó a mi madre que hiciera algún deporte porque tenía problemas de peso. Y me apuntó a la Unión Deportiva de Huerta. Yo soy de Huerta de Barcelona y teníamos la piscina junto a casa".

 
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