Uno de los arquitectos más destacados de en Catalunya cuanto a bodegas modernistas, Cèsar Martinell y Brunet, moría a Barcelona el 19 de noviembre de 1973. Nacido en Valls (Alt Camp), el 24 de diciembre de 1888, fue un arquitecto a caballo entre el Modernismo y el Novecentismo. Como personaje polifacético, también fue investigador, divulgador e historiador del arte.
Martinell construyó a principios de su carrera una cuadragésima de cooperativas vinícolas, sobre todo a las comarcas meridionales de Catalunya, en las cuales utilizó los prácticos y económicos arcos equilibrados de obra vista, o arcos de catenaria, siguiendo el consejo de su maestro Antoni Gaudí, y con la colaboración de Xavier Nogués en los plafones cerámicos. A estas construcciones debe de su fama.
Siete de sus bodegas cooperativas, la mayoría de los cuales fueron construidos entre los años 1918 y 1922, fueron declarados en 2002 bienes culturales de interés nacional en la calidad de monumento histórico. Son los de Cornudella de Montsant, Falset, Nulles, Barberà de la Conca, Rocafort de Queralt, Gandesa y Pinell de Brai. También fue calificada monumento histórico la Harinera del Sindicato Agrícola de Cervera.