Encarando ya la recta final del mes de agosto, hoy os proponemos hacer una receta aprovechando uno de los productos estrella de la temporada a Catalunya: el calabacín.
Una hortaliza de verano que, además de estar buenísima, tiene altas propiedades hidratants (el 95 % es agua), y se puede disfrutar de múltiples maneras a la cocina. En cuanto a sus propiedades nutricionales, es rico en Vitamina C, Vitamina B9 (ácido fòlic), Provitamina A (betacarotè), y minerales cómo el potasio y el magnesio.
Un producto que aporta múltiples beneficios a nuestro organismo, como por ejemplo, su fácil digestión en función del tipo de cocción (principalmente, al vapor, escaldado o cruda), tiene propiedades diürètiques, contiene luteína, que tiene efectos beneficiosos para la vista, y rico en fibra saludable.
Hoy os proponemos disfrutar de una receta que, además de ser baja en calorías, aporta proteínas y calcio, y sobre todo, fibra. Cocinamos troncos de calabacín rellenos.
INGREDIENTES (4 personas):
- 4 calabacines medianos
- 200 gramos de champiñones frescos
- 1 cebolla
- 1 puerro
- 50 gramos de jamón serrano
- 1 huevo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Nuez moscada y perejil
- Queso rallado parmesano
- Sal y pimienta
ELABORACIÓN:
- Empezamos por hervir el huevo.
- Mientras tanto, limpiamos los champiñones, la cebolla y el puerro, y los cortamos a trocitos.
- Ahora, limpiamos los calabacines, y los cortamos en tres trozos iguales.
- Los hervimos unos 7 minutos, sin que se nos deshagan.
- Cuando se hayan enfriado, los vaciamos, creando el espacio para rellenarlos, y guardamos el calabacín que sacamos.
- Ponemos una sartén al fuego, con un chorro de aceite, y salteamos la cebolla, el puerro y los champiñones a fuego lento.
- Cinco minutos después, añadimos el jamón (previamente picado) y un poco de perejil, también picado.
- Pasados unos minutos, lo salpimentamos, y añadimos una pizca de nuez moscada.
- Picamos el huevo duro y el calabacín que teníamos reservado, y lo añadimos a la sartén.
- Cuando esté todo muy mezclado, rellenamos los troncos de calabacín que habíamos reservado.
- Los ponemos en una bandeja de horno, y, por encima, ponemos queso parmesano.
- Lo gratinamos al horno unos diez minutos... y ya lo podemos servir.
- Podemos acompañarlos con una buena mezcla de lechugas.
Un plato buenísimo!