31 de enero: Un incendio destruía el Gran Teatro del Liceo
La sala del teatro quedó completamente calcinada, y aquel mismo día las instituciones públicas acordaron unánimemente que el teatro sería reconstruido
El 31 de enero de 1994 se vivía uno de los episodios más tristes de la cultura catalana. Y es que aquel día quemaba el Gran Teatro del Liceo de Barcelona . Entre dos y las once menos cuarto de la mañana, mientras dos operarios trabajaban en la reparación del telón de acero que, en caso de incendio, tenía que impedir que el fuego pasara del escenario a la sala, los chispazos de su soplete tomaron en los pliegues de la guardamalleta.
El fuego se va descontrolar, a pesar de que los trabajadores intentaron apagarlo antes de la llegada de los Bomberos minutos después de las once.
La sala quedó completamente calcinada, y aquel mismo día las instituciones públicas acordaron unánimemente que el teatro sería reconstruido al mismo lugar donde era y tal como era, pero con todas las mejoras necesarias.
Para hacerlo posible, se creó la Fundación del Gran Teatro del Liceo, y la Sociedad del Gran Teatro del Liceo cedió la propiedad del teatro a las administraciones públicas. Para obtener recursos, la Fundación emprendió una campaña de captación de dinero, consiguiendo la participación de un gran número de empresas e instituciones privadas, que ejercieron como patrocinadoras y mecenas y contribuyeron a la reconstrucción del teatro.