Qué celebramos por Todos los Santos?

Después de la celebración de la Castañada, y teniendo en cuenta los orígenes de esta celebración, el día 1 de noviembre, a Catalunya, se celebra la festividad de Todos los Santos. Una fiesta tradicional católica dedicada al recuerdo de los antepasados y que está íntimamente relacionada con la fiesta que se celebra el día siguiente, la del Día de los Muertos o Día de los Difuntos, el 2 de noviembre. Y es que, según la creencia tradicional, el 1 de noviembre los vivos visitan los muertos, y el 2 de noviembre, los muertos visitan los vivos.

La festividad de Todos los Santos es una de las más antiguas en el mundo cristiano. Por Todos los Santos, habitualmente, se acercaba el frío y los días se acortan cada vez más; y la naturaleza, después del verano, entra en una época de muerto aparente. Por todo esto, no es extraño que desde la antigüedad muchas culturas instituyeran el día de recuerdo de los muertos en torno a estas fechas.

Todos los Santos es día de recordar los difuntos. Por eso hay la costumbre de ir al cementerio a visitar la tumba de los antepasados, arreglarla y decorar-la con flores.

Uno de las costumbres más características de la festividad, cómo apuntábamos al inicio, es la celebración de la Castañada la noche previa, el 31 de octubre. Un encuentro originariamente de carácter familiar para comer castañas tostadas y moniatos, productos típicos del otoño, que, en sus orígenes, servían para coger fuerzas y soportar mejor el frío durante la noche de velatorio. Son típicos también los panellets, que tradicionalmente eran una ofrenda a los difuntos el día de Todos los Santos.